Cualquier amante de las miniaturas sabe lo importante que es la teoría del color y los colores para miniaturas en estas pequeñas piezas de colección. Gran parte del atractivo de estas representaciones a escala reducida se debe a que cuentan con un alto grado de caracterización y detalle.
Si vas a empezar a pintar miniaturas y buscas lograr la perfección en tus nuevas piezas es esencial que conozcas la teoría del color y qué has de tener en cuenta a la hora de aplicar sus colores.
Teoría del color aplicada a miniaturas
La teoría del color se centra en las distintas clasificaciones de colores que existen, las cuales van a servirnos de una u otra forma para caracterizar a nuestras miniaturas y conseguir un resultado óptimo.
Colores primarios, secundarios y terciarios
Los colores primarios pigmentarios (magenta, cyan y amarillo) son la base de la teoría del color y nos van a servir para conseguir distintas tonalidades de un mismo color. Al combinar los tres, el resultado que obtendremos será el del color negro. Los colores secundarios son el resultado de mezclar colores primarios entre sí, de dos en dos: magenta y cyan (azul), cyan y amarillo (verde) o magenta y amarillo (rojo). Por su parte, los colores terciarios se van a conseguir mezclando un color primario con uno secundario.
Todas las tonalidades intermedias dependen de las proporciones de la mezcla.
Colores complementarios
Además de los colores básicos con los que pintar miniaturas de iniciación, los colores complementarios se sitúan uno frente al otro dentro de la paleta cromática y te van a ayudar a resaltar las luces y las sombras de las partes de la figura, consiguiendo mayor realismo y contraste y colores menos brillantes o apagados.
Colores análogos
Son colores que están más próximos entre sí dentro de la paleta cromática. Te servirán para dar más armonía a la miniatura.
Triadas
Las triadas son tres colores situados a 120º el uno del otro dentro de la paleta cromática (por ejemplo: morado, verde y naranja). Son ideales para conseguir lograr piezas más coloridas de forma armónica.
Qué tener en cuenta a la hora de aplicar color a una miniatura
Calidad de la pintura
Elige una pintura que sea de calidad. Además de tu técnica como pintor, la calidad del material empleado va a ser importante para un buen acabado. La amplísima oferta de pinturas abre un extenso abanico de posibilidades para cualquier amante de las minifiguras y de los Wargames.
Intensidad del color
Las distintas variedades de colores se dividen según la concentración de pigmento. Algunas, como las pinturas Base, tienen una alta concentración y están recomendadas para la primera capa de color. También encontramos las Layer, con pigmentación algo más ligera que las Base, o las Technical, para conseguir los mejores efectos especiales.
Saturación
La saturación de un color se va a conseguir usando blanco o negro en mayor o menor medida sobre el color que elijamos. Obtendrás tonos más vivos y coloridos o apagados y grisáceos. Es esencial jugar con la saturación para avivar o hacer más pálida la miniatura.
Aplicación de sombras
A la hora de jugar con las sombras y de aplicar profundidad a algunas partes de la figura es fundamental utilizar colores complementarios y algo diluidos para evitar el conocido como “efecto sucio”.
En definitiva, es muy importante jugar con las distintas tonalidades de colores, su pigmentación y la amplísima paleta cromática.
Ya seas tanto un seguidor acérrimo de los juegos de mesa como un amante de los juegos de cartas y rol, te recomendamos que te adentres en el apasionante mundo de los Wargames y las pequeñas figuras ahora que ya conoces la importancia de los colores en miniaturas.